skip to main |
skip to sidebar
Había un hermano que le preguntó a Abba Isidoro el sacerdote, "¿Por qué te temen tanto los demonios?" El anciano le dijo, "Porque desde el día que empecé a practicar la ascesis, me he esforzado para prevenir que el enojo llegue a mis labios".—Padres del Desierto
No comments:
Post a Comment